Industria digitalizada y conectada

La industria digitalizada y conectada, también denominada industria 4.0, se enmarca en la cuarta revolución industrial y supone un cambio cultural y cualitativo de grandes proporciones.

Estamos hablando de digitalizar procesos, funciones y operaciones tanto de carácter interno (procesos administrativos, logísticos o de mantenimiento) como externo a lo largo de toda la cadena de valor (intercambio automatizado de información sobre pedidos con proveedores y clientes). Adicionalmente se trata también de evolucionar los productos con nuevas funcionalidades a partir de su sensorización y digitalización y en especial de la creación de nuevos servicios basados en datos.

La conectividad es el elemento central del proceso de digitalización de la industria. Pero también plantea retos y genera oportunidades para el sector industrial que deberá adaptar sus procesos, productos y modelos de negocio.

¿Cuáles son los ejes sobre los que sustenta la Industria 4.O?

• Internet de las Cosas.Permite que cualquier objeto esté conectado, a través de la red, facilitando la inteligencia autónoma en procesos y actividades. Hoy en día, tan sólo un 1% de las cosas están conectadas y se espera que en 2020 haya más de 50.000 millones de objetos conectados gracias a los sensores. Esto cambiará radicalmente los productos y servicios ofrecidos, y también la forma de trabajar de las empresas. El Internet de las Cosas conlleva significativas mejoras de eficiencia, productividad, calidad y seguridad gracias a la monitorización y gestión en tiempo real de objetos y personas. Y hace posibles funciones tales como la trazabilidad, el mantenimiento predictivo o la eficiencia energética.

• Cloud Computing o computación en la nube. Permite la provisión de recursos hardware y software, en forma de servicio, a través de la red, en tiempo real. Es decir, hace accesible la tecnología más avanzada a todas las empresas e industrias independientemente de su tamaño.

• Big Data.Su aplicación va desde el análisis de las preferencias de los clientes, a los ajustes de la producción según las predicciones analizadas y el mantenimiento predictivo.

• Robótica y automatización.Ya están implantados en la industria, pero están evolucionado con. integración de inteligencia. Por ejemplo, los sistemas de realidad virtual permiten simular entornos en los que el usuario interactúa y facilita por ejemplo el aprendizaje. Por su parte, los drones y vehículos no tripulados permitirán nuevas aplicaciones, todavía incipientes.

• Impresión 3D. Esta tecnología está cambiando radicalmente los procesos productivos, reduciendo los precios y los tiempos de lanzamiento, facilitando la personalización, la creación de prototipos rápidos y una infinidad de aplicaciones industriales, hasta hace poco inimaginables.